Estos higaditos de pollo encebollados son un guiso de toda la vida de las abuelas. Puedes añadir arroz para convertirlo en un sabroso plato familiar.

500 g de higaditos de pollo (el peso es ya limpios de corazones)
1 cebolla grande
3 dientes de ajo
aceite de oliva
1 vasito de vino oloroso seco o cualquier buen vino de guiso
sal y pimienta
Un toque de especias al gusto, le van muy bien el clavo, nuez moscada y hasta un poco de canela molida
1 hoja de laurel
perejil picado

ELABORACIÓN de los higaditos de pollo

Calentar el aceite en una sartén, añadir el laurel y la cebolla pelada y cortada en juliana y rehogar hasta que empiece a dorarse.
Agregar los ajos laminados, dejar un par de minutos, y poner los higaditos, sal y pimienta.
Saltear a fuego vivo unos 5 minutos para que doren un poco los higaditos. Regar con el vino, dejar que se evapore el alcohol, poner las especias y remover.
Tapar y cocer otros 10 minutos más regulando el nivel de líquido si es necesario para que no se quede seco. Espolvorear con perejil picado y servir calientes.

Podemos sustituir el perejil por hierbabuena que aporta frescor al plato.
Este guiso es perfecto para añadirle arroz y guisarlo en la salsa. Añade más líquido y regula el nivel de sal.

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