Estos calabacines salteados con jamón y queso se pueden servir solos como entrante ligero o cenas rápidas. También pueden acompañar a carnes, pescados, huevos…

ELABORACIÓN de los calabacines salteados con jamón y queso

Lavamos los calabacines y los cortamos en rodajas de medio centímetro y luego por mitades.
En una cazuela o sartén al fuego salteamos en aceite la cebolla picada, espolvoreamos con sal para que suelta el agua y dejamos que se haga lentamente. A medio hacer ponemos también el ajo laminado.
Cuando el sofrito esté pochado ponemos los calabacines con el jamón, salpimentamos, ponemos la nuez moscada al gusto y dejamos hacer primero tapado removiendo a menudo durante unos minutos. Al final destapamos para que se consuma el líquido que suelta la verdura y vamos salteando hasta que alcance el punto que nos guste. A mi me gusta que la verdura quede al dente.
En el último momento ponemos el queso fresco cortado a taquitos y damos unas vueltas para que se derrita un poco sin llegar a desmoronarse mucho. Servimos caliente espolvoreado con un poco de perejil picado si te gusta.

Si lo prefieres puedes usar jamón cocido o fiambres de pavo o pollo, o sustituir el queso fresco por tiras de queso rallado a tu gusto. En este último caso puedes poner el queso ya fuera del fuego con el salteado caliente y revolver un par de segundos. Con ese calor bastará para que el queso se derrita un poco.