Aquí tienes algunos trucos para asados de carne siempre jugosos y en su punto que te harán triunfar con estos platos tan especiales.
Cocinar la carne al horno es una de las mejores maneras de disfrutar de todo su sabor y propiedades nutricionales, y si seguimos estos consejos la carne además conservará sus jugos y nos regalará su mejor versión. Cada carne tiene sus peculiaridades, así que empezaremos por algunos consejos genéricos según la variedad que elijas y luego seguimos con trucos para asados que hay que respetar como regla general.
Mejores carnes para asar en el horno
- Carne de pollo o pavo. Siempre es mejor asarlos enteros o en cuartos de buen tamaño. El pavo tiene una carne más seca y habrá que incluir elementos adicionales grados como lonchas de tocino o bacon con los que envolver las piezas, o inyectar grasa en las pechugas (mantequilla derretida, por ejemplo) cuando se asas un pavo entero. En cuanto al pollo, más jugoso, su asado básico consiste en salpimentarlo y colocar en su interior unas hierbas aromáticas, medio limón y unos dientes de ajo machacados de un golpe. En una hora a 200 ºC y regando con sus jugos tendremos listo el pollo asado. Mira nuestra receta de pollo asado al limón.
- Carne de ternera. Los mejores cortes para asar son el solomillo (es clásica la receta de roast beef), el redondo, que es magro y tierno, el chuletón y los lomos bajo y alto. Después de marinarlos o simplemente salpimentarlos, conviene meterlos a horno fuerte (200 °C) los pimeros 10 o 15 minutos para que se selle la carne por fuera y se retengan los jugos. Después se baja el horno a 180 ºC para que la carne se haga por dentro y se riega a menudo con sus jugos. El tiempo de asado dependerá de cada pieza.
- Carne de cordero. La carne de cordero es muy grasa, lo que la convierte en una de las favoritas del horno. Basta con añadirle sal y hornear en una fuente añadiendo solo un poco de agua y jugos del asado durante la cocción. Es mejor voltear la pieza a mitad del asado para que se haga por igual.
- Carne de cerdo. Chuleteros, lomo, pierna y cortes del ibérico como la presa, son los mejores cortes para asar. Como el cerdo es muy graso, solo tendremos que poner sal y unas hierbas para obtener un buen asado. Se puede aromatizar con vinos para aromatizar o con zumos de frutas (piña, naranja…) si quieres dar un toque agridulce y caramelizar la carne en el exterior.
9 trucos para asados de carne jugosos y en su punto
Nunca cocines carne sin descongelarla bien
Meter la carne al horno a medio descongelar o congelada es asegurarnos el fracaso. Si vas a asar carne previamente congelada tendrás que descongelar la pieza a la perfección, y asegurarte de que el interior está perfectamente descongelado antes de asarla. También conviene secarla muy bien con papel de cocina para eliminar los posibles restos de agua que impidan que la carne dore bien en el horno.
La carne, siempre a temperatura ambiente
Antes de preparar tu asado, saca la pieza de carne de la nevera al menos con un par de horas de antelación. La carne a temperatura ambiente libera sus jugos y eso hará que el asado resulte más jugoso.
Marinados y adobos hacen la carne más jugosa
Uno de los clásicos trucos para asados es recurrir a marinados y adobos y sumergir las piezas de carne en ellos desde unas horas antes, o incluso desde el día anterior. Así la carne aumenta su jugosidad interior además de potenciar sus sabores antes de llegar al horno. Mira como ejemplo el marinado que te proponemos en nuestra receta de roast beef.
Precalentar siempre el horno
Lleva la carne al horno cuando haya alcanzado bastante temperatura (normalmente unos 200 ºC). Así conseguirás que la carne cree una capa dorada en su exterior y se retengan los jugos en su interior durante el asado. Después de los primeros 15 minutos ya puedes bajar la temperatura para que la carne se cocine bien por dentro, y si ves que se dorar demasiado, cúbrela con papel aluminio mientras se termina de asar. Este es uno de los trucos para asados que siempre hay que respetar.
La grasa, siempre hacia arriba
Un básico entre los trucos para asados perfectos. Al meter la carne al horno, procura siempre que la parte más grasa esté en la parte de arriba. Así se irá ‘derritiendo’ esa grasa sobre la pieza de carne haciendo que el interior quede más jugoso. A mitad de asado ya puedes voltear la pieza normalmente para que se haga por igual.
Regar a menudo la carne y no pincharla
Durante el proceso de asado hay que regar a menudo la carne con agua o con los líquidos del propio asado o la marinada previa. De esta manera conseguiremos que la carne mantenga siempre su grado de humedad y resulte más jugosa en el interior. En una asado de 1 hora, tendremos que regar la carne entre 3 y 4 veces. No pinches la carne hasta el final para ver el punto, porque por esos pinchazos se escapan líquidos del interior y se reseca.
Respetar los tiempos de cocción de la carne
Aunque cada corte de carne tiene sus peculiaridades y es mejor seguir cada receta, podemos dar unos consejos generales sobre los tiempos de asado de las carnes en el horno para conseguir el punto deseado.
- Para que la carne resulte jugosa: 15 minutos por cada 1/2 kg.
- Para que la carne resulte al punto: 20 minutos por cada 1/2 kg.
Cómo comprobar el punto de la carne
Transcurrido el tiempo de asado señalado en la receta, se puede pinchar la carne para comprobar su punto. Observaremos los jugos que salen del asado.
- Si los jugos son rojizos, la carne está poco hecha.
- Si los jugos son rosados, la carne está al punto.
- Si los jugos son incoloros, la carne está completamente hecha.
Dejar reposar el asado en el horno al menos unos 10 minutos
Otro de los imprescindibles trucos para asados que hay que respetar. Al apagar el horno después de una asado la carne sigue cociéndose unos minutos y los líquidos se reabsorben. Si la cortamos o la sacamos del horno demasiado rápido, solo conseguiremos que pierda jugosidad.
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